domingo, 8 de mayo de 2016

Calma




Imagen de Isabel Zaldua
Dentro de su mente dibujaba cabezas de cocodrilo asomando sigilosas en un río de dudas. La imagen no era nítida. Sus pensamientos iban rápidos como una canoa con trece remeros que paleaban acompasados en aguas tranquilas. No lograba parar el flujo de lamentos que se oían. Quizás fuera el viento que se arremolinaba entre los huecos de las montañas y que arrastraba hacia el infinito las pocas nubes que lo cegaban. O quizás fuera su propia fragilidad la que deformaba una realidad azul que parecía irremediable. Solo quería parar, congelar en un instante el caudal de imágenes sin sentido que no le permitían observar su propio reflejo. Un espejismo distorsionado por la impotencia ante un futuro imprevisible.