sábado, 16 de noviembre de 2013

Ser o no ser

Es extraño encontrarse un cráneo en la orilla de la playa, más aún si esa calavera resulta familiar, tanto como que al cogerla descubres que es la tuya, tu propio cráneo olvidado tiempo atrás, un día que necesitaba meditar sentado en la arena con las olas salpicando salitre en las cuencas de los ojos.

Sí, dejé mi cabeza olvidada por un desdén de conjeturas espesas capaces de hacerme olvidar lo primordial, el propio yo. Un yo solitario que intentaba arreglar los desequilibrios humanos, que pretendía cuadrar las horas del día para que el puzle de la rutina no perdiera su pieza central, que esquivaba cuchillos con sonrisas escandalosas,
alejando los malos farios intuidos en las miradas sórdidas que vigilan el éxito.
Olvidarse de la cabeza sólo le puede pasar a un ignorante descuidado, a un patán con aire de filósofo que juega al “ser o no ser” con su propio cráneo. Sólo le ocurre al que se mira el ombligo sin ver el final, sin percatarse que el hueco acaba donde empieza la primera cicatriz de la vida.
Estoy por dejar en la orilla también mi cuerpo, para ver si la casualidad une la división y por fin se juntan pensamientos con deseos, sentidos con movimientos, sueños con realidades.

Estoy por quedarme aquí quieto, sentado en la arena, contemplando el mar de mis propios recuerdos.

5 comentarios:

  1. Estupendo, Inma, alegoría a la parálisis como ilusión reunificadora, que no, que no hay que perder la cabeza, tampoco sentarse a esperar advenimientos. A trabajar...

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  2. Precioso texto Inma, que dice mucho más de lo que dice y...dice mucho. A mí me habla de integrar cabeza y cuerpo, aunque no solo eso. Mente,emociones, instintos... integrados hasta formar una sólida unión que haga aflorar al ser auténtico que llevamos dentro. Ese ser despojado de ego y que refleja la coherencia del pensar, sentir y hacer en una única e inconfundible dirección.

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  3. Precioso texto Inma, que dice mucho más de lo que dice y...dice mucho. A mí me habla de integrar cabeza y cuerpo, aunque no solo eso. Mente,emociones, instintos... integrados hasta formar una sólida unión que haga aflorar al ser auténtico que llevamos dentro. Ese ser despojado de ego y que refleja la coherencia del pensar, sentir y hacer en una única e inconfundible dirección.

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  4. ¡qué maravilla,Inma! Es un gusto leerte

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  5. Pues a mí me va bien tener la cabeza en un lado y el cuerpo por otro... tendré que hacérmelo mirar...

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